La exposición de nuestro país a la comunidad internacional ha motivado a nuestro presidente, Alan García Pérez, a presentar la candidatura de nuestro país como sede los Juegos Olímpicos del año 2020.
Amparándose en el crecimiento económico sostenido, la disminución de los índices de pobreza y las altas tasas de inversión extranjera son factores según Alan García que condicionan a nuestro país organizar un evento de tal magnitud.
En realidad los factores mencionados no han favorecido de manera tangible al ámbito deportivo. Por ejemplo Nuestro estadio nacional esta a años luz de convertirse en un Wembley. Las contadas Federaciones deportivas que apenas sobreviven no cuentan con las instalaciones adecuadas para entrenar.
En estos momentos Perú es inelegible como sede de unas Olimpiadas. Esto se debe a que antes debemos organizar un campeonato panamericano. Y esta no sucedería antes del 2015. Lo cual dificulta más la situación.
Países como Italia, Canadá y China actual sede de Las olimpiadas han invertido miles de millones de dólares en remodelar sus instalaciones e incluso ejecutar nuevas obras solo para convertirse en candidatos. Si nuestro país desea competir estamos demasiado atrás en la competencia.
A través de las historia nuestras delegaciones deportivas nos han dado algunas glorias en medio de innumerables desilusiones. Es ahí donde nos planteamos la pregunta ¿Cómo soñar con organizar las olimpiadas si a duras penas logramos participar en una?.
En un país donde los problemas son la pobreza y el desempleo no podemos destinar dinero en probar suerte en eventos deportivos que están fuera de alcance por el momento.
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